Adlih Elisa Becerra

Mónica como estas!! Que lindo es cuando te responden y te hacen sentir que podés ayudar a otros no? Me pareció linda la idea de contarte mi historia, pero me encantaría poder hacerlo personalmente ¿sos de Buenos Aires no? Fui una sola vez y paseamos rápido y me quedé con muchas ganas de volver y detenerme a observar todo… ya lo voy a hacer algún día y espero poder visitarlos.

Bueno te cuento un poco mi historia:

Desde que nací tuve rechazo por la leche y vomitaba cada vez que tomaba la leche materna, lo que me generaban ahogos a repetición bastante grandes. Los médicos no entendían que podía suceder ya que físicamente estaba todo desarrollado y bien. Cuando fui creciendo, no solo los vómitos se asentaron sino también las diarreas o la famosas «colitis o virus», llegando a la conclusión de que eran «problemitas Psicológicos». Me costaba bastante estudiar, era un esfuerzo muy grande. En mi adolescencia esos síntomas desaparecieron, pero hormonalmente no arrancaba. Menstrué de bastante edad y la irregularidad en mi ciclo era normal. Granos, aftas, caries y todo tipo de déficit acechaban mi cuero. Empecé con la facultad y casi al final de mi carrera ya no podía llegar a la Universidad caminando porque debía defecar de dos a tres veces antes de llegar al aula. Esto me llevo de médico en médico, sin conducirnos a un diagnóstico preciso. Luego debí asistir a un alergista, quien me trató las alergias alimentarías, pero aun así continuaba mal y fue entonces que me indicó que me hicieran la biopsia de intestino, la que me dio positivo. A partir de ahí, muchos de los males pasados desaparecían generándome un bienestar nunca antes sentido. Yo decía: «mi estar bien antes era un estar menos mal”. Pero ahora sé lo que se siente «sentirse bien» y lo que más me sorprendía era saber que tenia ganas de comer determinado alimento y no me daba lo mismo comer cualquier cosa, yo quería comer algo especifico…que sea tal cosa.. ¿me entendés no?
Aun así continuaba mal y mi dieta era cada vez mas restringida y sin entender lo que me sucedía. Bajaba y subía de peso en un día entre 3 y 5 Kg. Pensaron en que era diabética, pero los análisis con el azúcar daban correctamente. Asistí a diferentes médicos especializados en distintas materias y nada.
Pero uno de los tantos hizo los análisis de la Diabetes Insípida, ya que cada 15 minutos tenia que ir al baño ha orinar y no podía salir de mi casa ni para ir al cyber. Una vez descubierto esto comienzo el tratamiento y a mediada que avanzaba, también empeoraba. Por lo que decidimos con mi papá cambiar de médico.
En ese momento me tuvieron que internar porque el mal manejo de la hormona llevó a un cuadro severo y peligroso de mi físico, recién ahora estoy saliendo de todo esto. Pero jamás bajé los brazos y aun los tengo bien altos porque sé lo lindo que es sentirse bien en cuerpo, mente y alma.
En todo este tiempo no solo me recibí: tuve varias parejas e hice nuevos amigos, crecí en mis aspectos personales y aprendí mucho.
Hoy te puedo decir que fue muy difícil aquella época, pero no menos que esta y pese a todo continué y voy a continuar hasta que pueda acceder a completar totalmente el ser quien soy, pero por sobre todas las cosas a disfrutar de lo lindo y lo feo, las tristezas y las alergias, es decir, voy a continuar viviendo para ser feliz..

– Adlih Elisa Becerra